Cuando un grupo de jóvenes
profesionales del teatro decidimos realizar un Festival de Teatro Paralelo,
cuya característica consiste en llevar este arte a los lugares donde este no
llega habitualmente, y por ende carecen de todas las bondades que brinda el
solo hecho de ver teatro, nunca nos imaginamos todas las incongruencias,
maldades y atropellos que conlleva hacer un festival de este tipo, y esto solo confirma
la necesidad que existan muchos festivales de este tipo, que se propone en cada
entrega tocar los rincones más remotos de nuestro país, en especial aquellos
donde la violencia y la falta de valores reina.
Es por todo esto, que esta
Tercera Edición pretende realizar una función de títeres en las arenas de la
playa del municipio Boca Chica, para llevar lo mejor del arte y la cultura a
los niños y niñas de esa comunidad que tanto lo necesitan, pero este deseo y
gestión se ha visto obstaculizada por aquellos que son los llamados a promover
este tipo de actividades, entre otros, LA ALCALDIA DE BOCA CHICA. Cuanta
ambición y falta de conciencia de aquellos que guían las políticas de este
país, es la alcaldía de Boca Chica, quien ante todo se niega a recibirnos en
una cita con el Síndico, quien además permite que el departamento de impuestos
nos cobre RD$ 40,000 por hacer una función gratuita para todas las familias de la
comunidad, siendo nosotros además una Fundación artística y sin fines de lucros,
detalle que los empleados de dicha institución no acaban de entender pues no
saben cómo llamar a lo que nosotros pretendemos realizar, citamos:
"Ah! sí, ustedes son la
escuela Anacaona que quiere hacer una cosa ahí en la playa y quieren ver al
alcalde para no pagar los impuestos".
No acabamos de entender cómo es
que este tipo de personas, tiene un cargo determinante en el desarrollo de las
comunidades, y en especial Boca Chica, que debe ser sabido por todos, el nivel
de corrupción que se mueve entre sus resquicios. Debemos decir que estamos
indignados, pero a la vez determinados a seguir llevando el arte a lugares como
este, porque aunque el Festival Internacional de Teatro Paralelo, no pueda
hacer la función en Boca Chica, habrá logrado su cometido, saber y denunciar el
por qué, ya que esto es solo un diminuto ejemplo de lo que pasa en nuestro país
con la cultura, la cual tiene un Ministerio que se declara insolvente, pero que
permite llevar a cabo proyectos con elevados presupuestos para luego no pagar,
tal es el caso de los premios del Festival Emilio Aparicio que se celebró en
Marzo de este año y aun no hay respuesta de esos pagos, incluyendo el de los
jurados que ya realizaron un trabajo y cumplieron con su parte del acuerdo.
Cada día hacer teatro se
convierte en un ACTO HEROICO en este país, pues no hay apoyo para lo que es el
alimento del espíritu, el arte, tanto para los que los hacemos como para
quienes lo consumen, pero reafirmamos nuestro compromiso de seguir adelante,
aunque “La alcaldía no quiera teatro en Boca Chica”, “Cultura deba el pago del
Emilio Aparicio” y “Educación debe el pago de la Feria del Libro”.
Por todo esto gritamos con más
fuerza el lema de nuestro Festival Internacional de Teatro Paralelo:
“Hagamos algo por la Patria”
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